Se acerca la época de comenzar a planificar las vacaciones en familia, y la decisión se complica cuando los padres deben decidir si viajar en avión o no con niños pequeños. En esta nota les brindamos algunos consejos prácticos.
La edad no es un factor que inhabilite a los niños para viajar en avión. Sin embargo se recomienda, de no tratarse de un viaje impostergable, realizarlo luego de las 6 semanas de vida del bebe.
Los bebes de 0 a 2 años viajan sin ocupar asiento. Pueden viajar en el regazo de sus padres, pero la mayoría de las aerolíneas para vuelos internacionales tienen cunas y sillas portabebés especialmente diseñadas para el viaje aéreo. Los niños mayores a 2 años viajan ocupando asiento junto a sus padres.
Al igual que las personas mayores, los bebes pueden tener trastornos en sus rutinas de sueño y alimentación en viajes largos con diferencia horaria significativa.
Algunos consejos:
Aunque en los aviones hay restricciones en cuanto al transporte de líquidos, esto no rige para los alimentos de los bebes como leche maternizada o jugos.
Si el bebe solo toma biberones, calcule cuantos necesita para todo el viaje y al menos dos más por posibles retrasos. Las papillas y los purés deberán llevarlos preparados, ya que por lo común las compañías no ofrecen este tipo de comida a bordo.
En los aviones modernos se cuenta con un sistema de presurización muy seguro, que solo causa cambios de presión de la cabina notorios en los momentos de despegue y aterrizaje. Esto puede producir cambios temporarios en la presión del oído medio que desencadenan molestias y taponamiento. Para ayudar a equilibrar esos cambios hay que estimular la deglución en el despegue y aterrizaje (un biberón o vaso de agua es suficiente). Los niños que sufren una otitis media aguda, no tienen contraindicado viajar.
Ante un niño enfermo se recomienda consultar a su pediatra de cabecera si sugiere o no posponer el viaje.
Dr. Ariel Almada
M.N. 116.474